El martes último se conoció la decisión
de José Antonio Griñán de no continuar como Presidente de la Junta de
Andalucía. Para Izquierda Unida, socio en el gobierno andaluz, el cambio
de presidente no cambia nuestra hoja de ruta y mantenemos el programa
para la gente y por los problemas de la gente, tal como hemos hecho y
venimos haciendo desde otros ámbitos de gobierno local o desde las
calles.
Para
Izquierda Unida, por lo tanto, la marcha de Griñán no debe significar
cambio alguno en el proyecto estratégico recogido en el Acuerdo por
Andalucía que ambos partidos firmaron en su momento, aprobado
mayoritariamente por las bases de Izquierda Unida y que es
la acción que lleva a cabo el gobierno, con las 250 medidas y 28 leyes
que, en mayor o en menor medida avanzan en su desarrollo camino de
hacerse una realidad.
La
prioridad, por lo tanto, es llevar a cabo nuestro programa alternativo
contra las políticas ultraliberales de la Troika y del gobierno central
del PP que sólo traen paro y pobreza. Nuestras medidas más inmediatas
serán la aprobación de la Ley de la Función Social de la Vivienda, la
puesta en marcha del proyecto de Banca Pública en Andalucía, el Banco
Público de Tierras o los Presupuestos de la Junta para 2014, que blinden
los servicios públicos, ahora amenazados.
Por lo tanto, nuestra presencia en el
gobierno andaluz queda supeditada, como lo ha estado desde el principio,
a mantener la apuesta por un gobierno de resistencia y alternativo a
favor del pueblo trabajador y para la regeneración democrática.
Celebramos
que el socio de gobierno vaya resolviendo las cuestiones internas para
que se ponga a la misma velocidad que IU mantiene desde el principio.
Sacar a Andalucía de la situación de emergencia que sufre nuestra tierra
por culpa de esta crisis-estafa es el objetivo esencial de nuestra
fuerza política.
Izquierda
Unida va a continuar haciendo propuestas a favor de la mayoría social
desde su presencia en el gobierno andaluz, políticas diferenciadas de
otras comunidades autónomas y, por supuesto, contrarias a las que lleva a
cabo el gobierno central del PP.
Por
último, y aún siendo conscientes de que en este momento un adelanto
electoral incluso podría beneficiar a Izquierda Unida, anteponemos la
continuidad del Acuerdo por Andalucía que, en estos momentos, es más
eficaz porque hace frente, desde la resistencia, a las políticas de la
Troika y del gobierno del PP.