PSOE E IU, QUIEREN FORZAR EN ENERO EL DEBATE DE LA NUEVA LEY DE DESAHUSIOS


Para cerrar sus enmiendas, los grupos de la oposición cuentan ya con un caudal de propuestas muy notable que les llega de los Ayuntamientos, de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) y de la oficina del Defensor del Pueblo. El PSOE ha pedido disculpas por haber votado en contra del cambio de la Ley Hipotecaria cuando estaba en el Gobierno, y en  Cártama (el PSOE)se ha desmarcado de esta política y ha preferido silenciar la propuesta de IU, de elevar al gobierno la petición de que se modifique la legislación de acuerdo con las propuestas de la Iniciativa Legislatura Popular.

 El decreto ley de medidas para paliar los desahucios, aprobado por el Gobierno el 15 de noviembre, fue convalidado por el Congreso, solo  UPyD. dió su apoyo.

 En las enmiendas que preparan el Grupo Socialista e Izquierda Plural, se pide también el aumento del umbral máximo de rentas para poder entrar en el cupo de las medidas paliativas por el impago de la hipoteca. En el proyecto del Gobierno el tope se sitúa en 19.200 euros anuales entre todos los miembros de la familia.
M. Infantes, concejal de IU, en la resistencia activa al desalojo

Las enmiendas al proyecto del Ejecutivo del PP plantean asimismo crear programas de mediación con los bancos para renegociar las hipotecas y que, antes de aplicar la dación en pago (la entrega del piso para saldar la deuda), se apliquen medidas alternativas como el “alquiler social”, de modo que los afectados puedan quedarse en su vivienda y pagar un alquiler acorde con sus posibilidades hasta que su situación mejore.
En todas las enmiendas figurará la petición de que los bancos que reciban ayudas del Estado faciliten a los ciudadanos pisos de alquiler.

 Los partidos admiten que la iniciativa la han llevado los grupos ciudadanos.
A veces hay gestos ciudadanos que adelantan por la izquierda al Estado. A la espera de que lleguen (si lo hacen) las soluciones públicas para las miles de familias que han sido desahuciadas —un máximo de 15.000 en los últimos cuatro años, según el Gobierno—, algunos particulares han empezado a tomar partido en el drama general de los desalojos, con una arriesgada iniciativa: ceder de manera gratuita (o casi) un techo de forma temporal a una familia que ha perdido su casa. No están coordinados. Y muchos lo hacen sin buscar la fama ni sentirse héroes.