IU exporta a Andalucía el éxito de la bicicleta en Sevilla

Con Izquierda Unida en el Gobierno, la bicicleta ha dejado de ser un elemento decorativo del discurso político en Andalucía para convertirse por fin en un elemento central de la planificación de infraestructuras y movilidad. La Consejería de Fomento y Vivienda, dirigida por nuestra compañera Elena Cortés, ha sacado a información pública (hasta el 26 de septiembre) el Plan Andaluz de la Bicicleta, que prevé la construcción de más de 1.000 kilómetros de vías ciclistas en las ciudades y áreas metropolitanas de la comunidad (las ocho capitales más Jerez de la Frontera y Algeciras).
Su aprobación definitiva, prevista para finales de año, dotará a Andalucía de la primera herramienta para planificar y construir una red de vías ciclistas amplia y cohesionada, así como para promover su uso. El objetivo está claro: que al menos el 10% de los desplazamientos cotidianos en nuestras áreas urbanas se realice en bicicleta, convirtiéndose en una alternativa real al coche y repitiendo así el éxito de Sevilla, donde el impulso dado por IU a este medio de transporte durante su etapa en el Gobierno local la convirtió en la cuarta mejor ciudad del mundo para ir a pedales por detrás de Ámsterdam, Copenhague y Utrecht.
El Plan Andaluz de la Bicicleta tiene un horizonte temporal hasta 2020. La inversión prevista es de 402 millones de euros: 177 en la red urbana, 156 en la metropolitana y 69 en la regional, ya que recoge también 3.080 kilómetros de vías de carácter autonómico, en su mayoría 2.625) ya existentes sobre el trazado de vías pecuarias y caminos rurales, por lo que las actuaciones previstas irán dirigidas a su adecuación, señalización y conexión.
El uso de la bicicleta aporta numerosas ventajas de todo tipo: Preserva el medio ambiente, cuida la salud, beneficia al turismo y al comercio, Elimina atascos y libera suelo para usos alternativos. El Plan Andaluz de la Bicicleta toma como referencia el caso de Sevilla, que en la década pasada desarrolló, con una inversión de apenas 30 millones de euros, una red de vías ciclistas de 138 kilómetros que permiten 72.000 desplazamientos diarios, más de 20.000 de los cuales son restados directamente al coche. Ahora la Consejería de Fomento y Vivienda quiere extender esta experiencia al resto de ciudades y áreas metropolitanas de Andalucía. Por supuesto, esta ambiciosa iniciativa preocupa a la derecha económica y política, consciente de que la bicicleta, además de ruedas y pedales, es un factor desestabilizador del statu quo, y desde luego un anatema para el Partido Popular, anclado en un modelo que privilegia al coche y a todo lo que conlleva: más y más construcción de infraestructuras, aparcamientos subterráneos, atascos, contaminación…
La inversión en infraestructuras para la bicicleta es la más eficiente de todas, entre 250.000 y 300.000 euros por kilómetro, con un coste de mantenimiento mínimo, frente a los 60 millones/kilómetro que supone la alta velocidad ferroviaria y los 10 que supera la autovía. Las vías ciclistas arrojan además un saldo óptimo en términos de coste y beneficios asociados. Una vez construido el total de infraestructuras previstas, y alcanzándose el 10% de desplazamientos (15% en el caso de Sevilla), Andalucía se beneficiaría de un ahorro de 413 millones de euros en conceptos como reducción de emisiones de CO2, menor consumo energético y mejora de la salud pública, entre otros. Es decir, el ahorro (413 millones) es mayor que la inversión (402).
El Gobierno andaluz, impulsado por el Viceconsejero de Fomento y Vivienda, José Antonio Gar-cía Cebrián, que ya experimentó con acierto en el Ayuntamiento de Sevilla como redactor de su Plan Director, con los avales, precisamente, del ejemplo de Sevilla y de este Plan, se encuentra en posición ventajosa para recibir fondos de la Comunidad Europea que destina para el desarrollo de infraestructuras de este tipo en el marco 2014-2020, poniendo a los ayuntamientos en bandeja de plata el desarrollo de vías ciclistas.  
La Consejería de Fomento y Vivienda asume el 75% del coste de la red urbana, mientras los ayuntamientos deberán aportar sólo el 25% o una compensación económica mediante la cesión de los ingresos por el cobro por la utilización privativa de los sistemas de telecomunicaciones (por ejemplo, fibra óptica) que se instalan durante la construcción de las vías. Una vez más, los alcaldes del PP tienen la oportunidad de apoyar políticas eficientes y modernizadoras  promovidas por IU desde la Junta. ¿Sabrán estar a la altura o veremos el habitual inmovilismo y el boicot de siempre?
Aquí puedes consultar el Plan y presentar alegaciones:  http://tinyurl.com/nvt9bho